Para los budistas, los mandalas son una forma de meditación, ya que al crear uno, el individuo se conectaba con la divinidad mediante el proceso de creación. Al ser elementos geométricos y usualmente simétricos, inspiran equilibrio y armonía, despejan la mente de todo pensamiento, concentrándose en las formas.
Entre los beneficios de crear o colorear mandalas se encuentran un aumento de la concentración, mejora en el estado de ánimo, disminución de la ansiedad, y mejora en la capacidad de atención. Además es una excelente manera de desarrollar la creatividad, al combinar colores y formas.
Como puedes ver, tiene beneficios muy similares a los de la meditación en silencio tradicional, pero aquí puedes expresar tu creatividad a la vez que meditas.