Seamos honestos, la espiritualidad y la brujería están de moda. Los medios de entretenimiento nos han traído un imaginario mundo donde la magia es posible de una manera extraordinaria. AHS: Coven nos mostraba los 7 poderes básicos de una bruja; El Mundo Oculto de Sabrina nos hizo desear pertenecer a un aquelarre, y vestirse a la moda como Sabrina.
Lo anterior, sumado a las corrientes new age y una oleada de cuentas de Instagram con una estética «witchy» han hecho que la brujería se convierta en algo deseable. De ninguna manera está mal, pero estas modas pueden darnos una idea errónea de lo que es la brujería y lo que no es.
Como practicante de brujería, esto me preocupa, aunque más por los adolescentes que practican magia sin protección o conocimiento. No me molesta que sea una moda, al contrario, ahora puedo encontrar más fácilmente ingredientes, información y cristales con una sencilla búsqueda en internet; pero esto también pone a riesgo a muchos jóvenes practicantes que hacen sin saber.
Lo he visto principalmente en adolescentes que se sienten atraídos por estas cuentas de Instagram de astrología y tarot; y que siguiendo cuentas en Tik Tok tratan de practicar magia sin saber lo básico, no comprendiendo conceptos tales como brujería, espiritualidad o wicca. He visto a niñas tratando de invocar demonios para hacer sufrir a sus «enemigas» y otras más buscando hechizos para solucionar cosas que se resuelven con una charla amena.
Espiritualidad y magia
Sin embargo, mi intención no es hacer una lista de quejas, sino una breve reflexión luego de haber practicado brujería durante casi un año. Sí, llevo poco tiempo practicando, si bien la decisión de ir por este camino espiritual se tomó mucho tiempo antes.
Entonces va la primera reflexión.
La espiritualidad y la brujería no son lo mismo, aunque deberían ir de la mano.
Estos conceptos también suelen confundirse como uno solo, si bien las brujas también suelen trabajar en su desarrollo espiritual, no es necesario que lo hagan. Las brujas pueden dedicarse a la hechicería solamente, es decir a realizar conjuros, hechizos y pociones.
La espiritualidad tiene que ver más con conectar con una misma, con la tierra, con la naturaleza y con un poder superior. Técnicas como la meditación, el anclaje a tierra, observación de la luna y celebración de festividades anuales son propias del trabajo espiritual. Incluso algunos rituales que he leído son más trabajo espiritual que mágico, por ejemplo los rituales de amor propio.
El camino espiritual va lleno de un desarrollo personal, de aceptación de nuestras emociones, habilidades y debilidades, integración de la sombra. En general, se trata de mejorar nuestra calidad de vida. Este camino no es necesariamente mágico, en el sentido que no es necesario practicar brujería, realizar hechizos y pociones o adorar deidades.
Lo mágico del camino espiritual es aprender a conocerse y amarse a una misma, modificar nuestra percepción del mundo mediante técnicas como la Ley de Atracción (así es, no es algo propio de la brujería o paganismo), la meditación o el yoga.
En el camino espiritual tampoco es necesario tener una religión, si bien algunos conceptos propios o parecidos a los del budismo pueden compartirse en este camino. Eres libre de elegir si pertenecer o no a una religión con una filosofía espiritual.
Brujería y hechicería
Ahora bien, la brujería y hechicería son prácticas que contienen la realización de hechizos y rituales. Aún así, puedes quedarte con la parte espiritual solamente, y no practicar nada de eso, o solo practicarlo de vez en cuando (como yo).
Un ritual es una serie de pasos que debes seguir para la obtención de un fin, algo que tiende a ser igual o variar poco a lo largo de tu práctica (tampoco es algo obligatorio), son algo más complejos que los hechizos.
Pueden involucrar:
- Fases lunares
- Días de la semana
- Hierbas, plantas, especias
- Inciensos y velas
- Palabras recitadas para tu intención
- Círculos de protección complejos
- Entre otras cosas
Para mi, la intención de los rituales es repetirlos, por ejemplo, cada ciclo lunar o cada fecha especial. Un hechizo en cambio, puede realizarse según se necesite, y siguiendo las correspondencias de cada elemento.
Un hechizo, por ejemplo, puede hacerse cuando se necesite dinero de manera inmediata para pagar una deuda, pero un ritual de abundancia puede hacerse cada mes para que no falte el dinero en el hogar.
Al menos esta es mi visión, alguien más podría tener otra, y está bien.
Espiritualidad, magia y yo
¿Cuál es la conclusión de este delirio? Que es importante distinguir entre lo que es el camino espiritual y lo que es la brujería, que si bien suelen ir de la mano, no son lo mismo.
También es importante reflexionar cuál queremos seguir primero, si vamos a caminarlos juntos y qué significa para nosotros cada camino. Es importante que aprendamos a seleccionar información, y reflexionar muy bien antes de realizar cualquier hechizo o ritual.
Lo más importante en la magia eres tu misma y tu intención, entonces cuando veas algún hechizo o ritual que te interese, piensa antes: ¿para qué quiero realizarlo? ¿Puede realizarse de manera no mágica? ¿Estoy metiéndome con el libre albedrío de las demás personas?
Como verás, el realizar un hechizo o un ritual requiere de energía, conocimiento y práctica, y antes de considerar realizarlos es importante dominar algunas cosas antes, como:
- La visualización.
- El anclaje.
- El escudarse.
- La protección.
Tampoco quiero parecer muy estricta, realiza hechizos y rituales cuando te sientas lista, solo procura conocer un poco antes. En realidad, lo peor que puede pasar es que tu hechizo no funcione.
Finalmente quiero agregar, como un consejo, que confíes en ti misma, leas hasta que te sientas cómoda, y trata de no de irte a la impulsiva al momento de realizar un ritual o un hechizo, prepárate al menos una semana antes, buscando las correspondencias, las fases lunares, hierbas y principalmente métodos de protección. Practica los 4 puntos anteriores, y cuando te sientas segura ponlos en práctica un sencillo ritual.
¡Espero te haya sido útil!
¡Bendiciones!